El viaje de incentivo para empresas, como actividad más o menos habitual, está más que consolidado en el entorno corporativo. ¡De eso no cabe duda! Y es que, con la inevitable salvedad de la pandemia, los viajes de empresas e incentivos no han hecho sino crecer en los últimos años. Según datos de la última encuesta de la Asociación Internacional de Viajes de Negocios (The Global Business Travel Association o GBTA, en inglés), de junio de 2022, las expectativas del sector son muy halagüeñas.
Preguntados acerca de las perspectivas de recuperación de los viajes de incentivo, el 88% de los proveedores de servicios encuestados se mostraron optimistas o muy optimistas. Al mismo tiempo, de todas las compañías aéreas, los hoteles, las DMC y las empresas de transporte que participaron de la encuesta, un 84% afirmó que solo en la última semana sus reservas se habían incrementado. En este contexto, las empresas que realizan viajes de incentivos están surfeando una ola en crecimiento y, en consecuencia, beneficiándose de las muchas ventajas de la tendencia. Eso sí, planear un viaje de incentivo para empresas exige organización y experiencia. ¡Estos consejos te ayudarán a planificarlo!
1. Encuentra la motivación
Lo primero de todo es saber por qué y para qué quieres realizar un viaje de incentivo. ¡Cada viaje es un mundo! Por ese motivo, más que preguntarte a qué tipo de empresas van dirigidos los viajes de incentivo (ya que la respuesta es a cualquier tipo de negocio que tenga voluntad de organizarlo), has de saber muy bien qué quieres conseguir con él. Así podrás buscar un proveedor de servicios a la altura y garantizar el éxito del viaje. Existen, por ejemplo, tipos de viajes de incentivos destinados a premiar a los equipos de trabajo más eficientes, mientras que otros buscan motivar a los empleados.
2. Escucha a los trabajadores
El bien más preciado de todo negocio son sus trabajadores. Preocúpate por su bienestar y planifica el viaje junto a ellos. Después de saber cuál es el objetivo, escucha a quienes lo disfrutarán. Hay formas muy variadas de coger ideas para el viaje y escuchar los deseos de los empleados: desde encuestas anónimas a votaciones, sin olvidar los brainstorming, que son muy valorados en algunos ambientes corporativos. Cada persona que vaya a beneficiarse del viaje debería tener la posibilidad de opinar.
3. Elige un buen proveedor de servicios
No olvides que los negocios persiguen el lucro y la rentabilidad; todo viaje de incentivo para empresas deberá tener asignado un presupuesto acorde con los intereses derivados de los dos puntos previos. No abras excepciones que comprometan las finanzas, ya que el propio viaje de incentivos constituye una novedad y una excepción dentro de la vida normal de la empresa. Para cuadrar los intereses del viaje con el presupuesto es importante valorar las diferentes posibilidades que existen en cuanto a paquetes disponibles: viajes deportivos, culturales, gastronómicos o incluso de lujo. La Costa del Sol ofrece alternativas para todos los bolsillos. ¡Elige tu proveedor de servicios y despreocúpate!
4. Equilibra la planificación y la libertad
Aunque es habitual que los viajes de empresas estén organizados al detalle, es conveniente buscar el equilibrio entre planificación y libertad. Especialmente cuando la duración del viaje es superior a 5 días. Esto permitirá a los empleados explorar el destino a voluntad, agruparse entre ellos según sus preferencias y comprar algún que otro recuerdo para la familia. ¡Da tiempo libre a tus empleados!
5. Haz balance y pide opiniones ‘a posteriori’
Para finalizar, es de suma importancia hacer un balance a corto y medio plazo con los empleados que fueron al viaje para saber sus opiniones y si los objetivos se han cumplido. Supongamos que un viaje pretendía motivar a un grupo de empleados determinado; sería interesante valorar a medio plazo si el rendimiento, la integración y las energías de cada uno han mejorado desde el término de la actividad. Del mismo modo, si el viaje era un premio a los más productivos, puede ser útil mostrar fotos o vídeos del viaje al resto del equipo para motivarlos y que aumenten su rendimiento de cara al próximo viaje.
Preparar un buen viaje de incentivo para empresas, como puedes ver, no es tan sencillo como parece a primera vista. Aunque con voluntad y conocimiento se puede hacer con fantásticos resultados. ¡Haz por escuchar a tus empleados, analiza detenidamente la situación de la empresa antes de organizarlo y disfruta del viaje y de todos sus beneficios! ¿Qué tal escoger la Costa del Sol como un potencial destino para tu próximo viaje de incentivo? ¡Anímate a descubrir la provincia de Málaga!