El debate sobre el futuro del trabajo está que hierve. Con empleados remotos, presenciales e híbridos discutiendo en las redes casi diariamente sobre el mejor modelo, saltan a la vista las divergencias que a menudo hay entre trabajadores y empresas. Y gracias a la libertad que les otorga la tecnología, los llamados nómadas digitales se libran del debate por la vía práctica. Porque, a fin de cuentas, nómada digital y trabajo son dos conceptos que van de la mano en nuestra era y cuya simbiosis ya se ha demostrado efectiva. Todos los profesionales independientes autodenominados nómadas conocen la magia del trabajo remoto, aunque también saben bien que deben prestar atención a otras cuestiones sumamente importantes para mantenerse a flote.
¿Cuáles son los costes de trabajar como nómada digital? ¿El combo nómada digital y trabajo es viable en España? ¿Un nómada digital paga impuestos? En este artículo arrojamos luz al asunto.
El nómada digital es un profesional autónomo cuya área de actuación le permite trabajar a través de internet y, por lo tanto, sin barreras geográficas. Los profesionales que optan por esta modalidad (es decir, que se dedican a sectores que les permiten ejercer el trabajo en cualquier lugar del mundo con buen acceso a internet) afrontan esencialmente tres tipos de obligaciones: gastos, inversiones en equipamientos y los pormenores tributarios derivados de su actividad.
Nómada digital en España: lista de gastos
Residencia fiscal e impuestos
En España, la mayoría de los nómadas digitales se encuadran en el régimen de trabajo autónomo. Se entiende que un nómada digital tiene su residencia fiscal en España cuando reside en el país más de 183 días por año, cuando el núcleo principal de su actividad radique en el país y/o cuando tenga intereses o lazos familiares en España (es decir, que su cónyuge o hijos menores residan en el país).
Siendo así, el nómada digital en España enfrentará el pago de dos tipos de gastos impositivos: cuota de autónomos e IRPF, cada uno de los cuales con sus particularidades. Adicionalmente, tendrá una obligación en la recogida del IVA cobrado por sus productos o servicios, a depositar trimestralmente a Hacienda.
Desde 2023, el sistema de cuotas de los autónomos seguirá un modelo por tramos en el que se paga en función de la previsión de rendimientos netos. La cuota mínima mensual, de 235 €, se aplica a quienes ganen menos de 670 € por mes y se incrementa gradualmente hasta el techo de los 510 € de la cuota máxima, para quienes perciban más de 6.000 € mensuales. En función de tus previsiones de lucro, puedes ver la cuota resultante en la calculadora de cuotas para autónomos 2023.
Inversión en equipamientos
Por lo general, el nómada digital ejerce sus actividades a través de las nuevas tecnologías. Y, salvo que trabajes por cuenta ajena y tu empresa te proporcione todo el material, existe un tipo de inversión muy necesaria para que eso sea posible. Por ejemplo, un ordenador portátil con los requisitos técnicos básicos para trabajar, una conexión a internet de calidad, un smartphone de gama media o alta y ciertos accesorios para los dispositivos pueden ser cruciales. Y eso sin hablar del espacio de trabajo, que a menudo se desarrolla transitando por cafeterías con WiFi o coworkings de pago. ¡Ten en cuenta el gasto en tecnología y espacios de trabajo antes de tu aventura nómada!
Málaga, un rincón interesante para el nomadismo
El coste de vivir en destinos como la Costa del Sol es mucho más bajo que el que encontramos en otros países de la Unión Europea, lo que convierte a este lugar en una opción muy atractiva para los nómadas digitales. Además, el auge de tendencias como la del coliving y los medios de transporte compartidos puede ayudar a reducir los gastos. ¡Y ya se sabe que quien busca acaba encontrando! Grosso modo, entre alquiler, alimentación y transporte se puede llegar a necesitar entre 800 y 1000 € al mes, aunque la horquilla puede aumentar o disminuir dependiendo de cada situación.
La Costa del Sol es, por sus cualidades climatológicas y estilo de vida, un rincón muy apreciado por cada vez más nómadas digitales. El nomadismo digital adquiere en la provincia de Málaga un sentido real y atrae a profesionales de todo el mundo. La alegría de la gente, el creciente abanico de coworkings y colivings, y la diversidad natural son tres factores diferenciales. Por todo ello, podemos afirmar que el nómada digital y el trabajo pueden llevarse bien siempre que se preste la debida atención a los gastos que este estilo de vida comporta. La clave está en tener un equilibrio, ser responsable y disfrutar de los lugares a los que la vida nómada te lleve.