Con la llegada del otoño a la Costa del Sol, los paisajes se visten de tonos ocres y dorados, mientras que los primeros fríos, siempre suaves, traen consigo una explosión de sabores que invitan a disfrutar de la gastronomía de temporada.
¡Sigue leyendo y descubre qué tienes que probar!
¿Qué comidas de otoño puedes disfrutar en la Costa del Sol?
Esta estación es ideal para saborear guisos de otoño, comidas típicas y manjares que reflejan la riqueza de la huerta andaluza, aprovechando productos frescos y de calidad que dan vida a recetas únicas.
Castañas: uno de los sabores más especiales
Los castaños que pueblan la provincia, especialmente en el Valle del Genal, ofrecen una de las estampas más otoñales del destino. Durante este período, los puestos de castañas asadas llenan las calles con un aroma cálido y tentador. Las castañas son, sin duda, uno de los productos más característicos de esta época.
Este fruto se convierte en el ingrediente estrella de varios guisos y platos tradicionales, como la caldereta de cordero con castañas. Este sabroso guiso, preparado con cordero, castañas, verduras y especias, se cuece lentamente en cazuelas de barro, logrando una combinación de sabores que reconforta el alma. Otro plato emblemático es el guiso de castañas, un manjar contundente donde las castañas se mezclan con garbanzos, tocino y callos, creando una receta que es una verdadera delicia de la gastronomía malagueña.
Además de los guisos, las castañas también se utilizan en postres, como las castañas en almíbar, un dulce típico de la temporada que endulza las sobremesas y refleja la esencia de la provincia en otoño.
Uvas pasas: el dulce sabor de la Axarquía
En otoño, las uvas pasas se convierten en otro de los grandes protagonistas. Procedentes de la comarca de la Axarquía, estas uvas, secadas al sol, dan lugar a uno de los productos más característicos: el vino dulce malagueño. Este vino, elaborado con la variedad moscatel de Alejandría, tiene un sabor inconfundible, dulce y afrutado, ideal para acompañar postres o disfrutar como aperitivo.
Las uvas pasas también se incorporan en platos tradicionales como el guiso de castañas, mencionado anteriormente, donde se combinan con otros ingredientes otoñales para crear una mezcla de texturas y sabores que celebra la riqueza de la huerta malagueña.
Sopas tradicionales: calidez en cada cucharada
Esta época también es ideal para disfrutar de las sopas y caldos tradicionales que reconfortan.
Una de las sopas más emblemáticas es la sopa perota, originaria de Álora. Este plato, elaborado con pan, tomate, cebolla, pimiento, ajo, hierbabuena, azafrán y pimienta molida, es el ejemplo perfecto de la gastronomía casera del destino.
Otro guiso tradicional que destaca es la chanfaina, especialmente conocida en Totalán. Esta receta, que combina patatas, vinagre, aceite y una amplia variedad de especias, es una de las más sabrosas.
¡Una delicia!
Zanahoria morá: un producto único de la Costa del Sol
La zanahoria morá de Cuevas Bajas es un producto singular que destaca por su color morado intenso y su sabor único. Este tubérculo, que en el pasado se cultivaba para alimentar animales, se ha convertido en un verdadero manjar.
La zanahoria morá se utiliza en una variedad de platos, desde cremas hasta mermeladas y ensaladas, aportando un toque original y sabroso. Además, esta variedad tiene su propia fiesta en Cuevas Bajas, celebrada cada primer domingo de diciembre, donde los visitantes pueden disfrutar de esta deliciosa zanahoria en diferentes preparaciones.
Platos de montaña: migas, chivo lechal y el plato de los Montes
En los Montes de Málaga, los sabores tradicionales cobran vida con platos robustos y reconfortantes.
Las migas, hechas con pan, ajo, pimientos, chorizo y tocino, son un plato emblemático de la región, ideal para compartir en un día fresco. Junto a ellas, el plato de los Montes combina carne de cerdo, cordero y embutidos, reflejando la riqueza de los productos locales y la cocina de montaña.
Otro de los grandes manjares de la zona es el chivo lechal, que se prepara de diversas formas, como paletilla asada o en caldereta.
Embutidos caseros: sabores auténticos
Los embutidos caseros de la Costa del Sol, como el chorizo, la morcilla, el salchichón y el jamón, se elaboran de manera artesanal, ofreciendo un sabor único gracias a su curación natural y el uso de especias locales.
Ideales para disfrutar en tapas, acompañados de pan, o incorporados en guisos y caldos, los embutidos malagueños son una delicia que refleja el auténtico sabor del interior de la región.
Ven a la Costa del Sol en otoño y disfruta de la gastronomía
El otoño en la Costa del Sol es una época perfecta para dejarse seducir por los sabores más auténticos del destino.
Con una oferta gastronómica que varía desde los exquisitos embutidos caseros hasta los sabrosos guisos de castañas, cada plato cuenta una historia de tierra y sabor.
Además, el clima suave de la temporada y los paisajes que se tiñen de ocres crean el entorno ideal para disfrutar de estas delicias al aire libre.
¡Ven y descubre por qué la Costa del Sol es el destino perfecto para los amantes de la buena mesa!
