Uno de los lugares por descubrir de la Costa del Sol es el mágico Valle del Genal, donde el tiempo parece detenerse y la naturaleza despliega su esplendor en cada rincón.
En este viaje, exploraremos tanto el Alto Genal como el Bajo Genal, descubriendo la autenticidad de sus pueblos, la riqueza de su historia y de sus monumentos.
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¿Qué pueblos blancos puedes explorar en el Valle del Genal?
Si quieres hacer una escapada familiar para visitar los pueblos blancos del Valle del Genal, presta mucha atención, porque te mostramos todos los detalles a continuación:
Bajo Genal: un paraíso rural que debes conocer
El Bajo Genal nos recibe con sus montañas cubiertas de bosques de castaños, un paisaje que cambia de colores según la estación del año, siendo una visita obligada Atajate, que destaca precisamente por esto. En sus bosques podrás hacer vías ferratas siguiendo la ruta hasta el Museo del Mosto. Es el pueblo más pequeño de la Costa del Sol y cuenta con interesantes fachadas dieciochescas y varios atractivos monumentales que visitar, como la iglesia de San José o de San Roque, la Fuente-Lavadero y el museo abierto del Mosto.
Otra joya de este lugar lo encontramos entre las montañas, Jubrique. Este pueblo blanco con calles empedradas y casas encaladas invita a perderse y a descubrir la autenticidad de la vida rural. En Jubrique podemos explorar el sendero circular de Matagallar, que nos permite adentrarnos en la naturaleza local y llegar hasta Genalguacil, un auténtico museo al aire libre gracias a sus bienales de arte contemporáneo.
Continuando nuestro recorrido por el Bajo Genal, llegamos a Algatocín, otro pueblo blanco con mucho encanto. Aquí, podemos deleitarnos con los deliciosos panes de Pan Piña, elaborados de manera artesanal con ingredientes locales, y podemos visitar: la iglesia de Nuestra Señora del Rosario, la ermita del Santo Cristo y el mirador del Genal, que proporciona una magnífica panorámica del valle.
Por otro lado, Benadalid destaca el Castillo, que son los restos de una antigua fortaleza de origen romano; Benalauría por las vistas desde su torreón; Benarrabá por su iglesia Parroquial de San Sebastián, del siglo XVIII; y Gaucín conocido como ‘el Balcón de la Serranía’, por las espectaculares panorámicas que regala su Castillo del Águila.
Alto Genal: Entre historia y naturaleza
Ascendiendo hacia el Alto Genal, nos adentramos en un paisaje de dehesas y ríos que nos cautiva con su belleza.
En Igualeja podrás disfrutar de la Cueva Excéntrica con unas preciosas formaciones kársticas. Si lo visitas, también merece la pena ver la iglesia de Santa Rosa de Lima, el Nicho del Señor de la Misericordia (plaza de Andalucía) y la ermita del Divino Pastor.
Por otro lado, no te puedes perder la mágica ruta del Bosque Encantado de Parauta, un recorrido de esculturas de madera de gnomos, hadas, duendes, entre otros, en el Parque Nacional de la Sierra de las Nieves.
En Júzcar, conocido como la “aldea azul” por el color azul de sus fachadas, nos sumergimos en un ambiente único y pintoresco. Aquí podemos explorar la antigua Real Fábrica de Hojalata, un monumento industrial que nos transporta al pasado, o el Museo Micológico, donde conocerás un poco más sobre las setas de la región.
Faraján que destaca por su entorno rural con una gran belleza paisajística, con senderos como el de las Chorreras o Alpandeire, el pueblo de Fray Leopoldo, donde podrás visitar la Catedral de la Serranía o el Mirador del Cuervo.
El pueblo más alto del valle, Cartajima donde podrás disfrutar de unas impresionantes vistas panorámicas, además de visitarla iglesia de Nuestra Señora del Rosario.
Finalmente, en Pujerra, el municipio de las castañas por excelencia, nos dejamos seducir por la historia y la naturaleza. De hecho, allí se puede visitar el Museo de la Castaña, donde se exhiben objetos y herramientas del siglo XVIII relacionados con la recolección de castañas.
Descubre el Valle del Genal: un tesoro único por explorar
En resumen, el Valle del Genal nos invita a descubrir la belleza de lo rural, la riqueza de su historia y monumentos. Ya sea explorando los maravillosos pueblos del Alto Genal o sumergiéndonos en la autenticidad del Bajo Genal, cada rincón de esta comarca de la Costa del Sol ofrece una experiencia inolvidable.