Si estás buscando un plan para disfrutar de las fiestas navideñas con tus hijos, la provincia de Málaga ofrece un amplio abanico de posibilidades, a cada cual más atractiva. Una buena opción es visitar algunos de los museos de la Costa del Sol y acercar la cultura y el conocimiento a los más pequeños de la casa.
Los recintos que a continuación te proponemos te permitirán viajar a distintas épocas y países o formar parte de interesantes experimentos científicos. Tú eliges.
Conociendo el mayor museo de belenes de España
Los amantes del belenismo tienen una cita en el interior de la provincia. De reciente apertura, el Museo de Belenes de Mollina es el mayor recinto de España dedicado a esta temática. Consta de siete salas expositivas en las que se pueden ver más de 60 belenes, entre ellos un gran belén popular de 25 metros que representa las 8 provincias andaluzas, o escenas en sitios tan curiosos como el Teatro Romano de Cartagena o en las favelas de Río de Janeiro.
El Museo de Belenes de Mollina puede visitarse durante todo el año; de hecho, en Semana Santa se prevé que se muestren exposiciones temáticas con el objetivo de ir ampliando los contenidos.
Para futuros científicos: Museo de la Ciencia Principia
El Museo de la Ciencia Principia es ante todo un museo interactivo. Un espacio vivo, en continua evolución, que acerca al visitante a la ciencia en todas sus vertientes. El centro se estructura en torno a cuatro salas: La Sala de Módulos Interactivos, la sala Faraday, el Planetario y el Observatorio Astronómico.
Todo aquel que lo visite tendrá la oportunidad de participar en curiosos experimentos: inflar un globo sin quitarle el nudo o introducir un huevo en una botella sin empujarlo. ¿Cómo? Habrá que hacer una visita para saberlo.
Sin duda, una experiencia inolvidable y una forma divertida de aprender junto a tus hijos.
Colección de Juguetes Antiguos
En el centro de Alfarnate se encuentra el Museo de Juguetes Antiguos, en donde se puede ver una amplia colección de juguetes únicos en Andalucía, fabricados entre los siglos XIX y XX. Entre ellos, hay piezas tan singulares, como un coche de pedales antiguo o un sorprendente altar con objetos sagrados de plomo para jugar a misa. Todas las piezas se encuentran muy bien conservadas y, en la mayoría de los casos, funcionan.
La mayor parte de los juguetes son de origen español, aunque también hay un pequeño grupo de piezas de Francia, Alemania, Reino Unido, Suiza o Italia. Sin duda, un museo para visitar con la familia.
